Redoble de tambores... Quiero presentarles la "Operación Bombón" que quiere sustituir a la odiada, por mí, Operación Bikini. Les detallo más adelante:
Confieso la terrible manía que le tengo a la Operación Bikini, por varios motivos que les enumero:
1. No hay que estar divinas para poder plantarte en bikini en mitad de una domingo playero. Este es un tema más amplio que habría que desarrollar, pero no es necesario tener un cuerpazo fitness para enfundarte en la ropa de baño. Si podemos ir a diario con algún michelín, ¿por qué a la playa no?
2. Es un atentado contra el cuerpo. Me explico:
3. Eso de hacer una dieta estricta y restrictiva antes de los meses de verano, que en muchos casos ni roza una alimentación saludable, me horroriza.
4. Para luego irnos a casa de los padres, al pueblo, al hotel o al apartamento de la playa, y comer como sacos sin fondo.
5. Incluimos en Operación Bikini los terribles esfuerzos por broncear la piel, a veces antes de verano para llegar morenitas, u otras veces durante el verano para que en septiembre no quede duda de que nos hemos pegado un veranazo. No señor, basta ya de maltratar la piel, creo que todos sabemos los grandes riesgos que supone una exposición solar excesiva.
Por todo esto, para combatir la Operación Bikini, traemos la OPERACIÓN BOMBÓN, cuyas premisas son:
1. Acabar con la idea de tener un cuerpo de pasarela. No existe una forma corporal perfecta, cada cual tiene la suya, y punto. La sociedad presiona, especialmente a las mujeres, para que tratemos de tener unas medidas de Cibeles (que por cierto, en su gran mayoría son medidas enfermizas para casi todas nosotras). Las revistas de moda y las redes de celebrities contribuyen a esa presión que supone no tener el estándar de "belleza suprema". Dejemos de obsesionarnos con tener X peso, X talla o X silueta, no existe un ideal de buenorrismo que debamos alcanzar.
2. Esto no implica que no esté bien lo de cuidarse. Personalmente, quiero mantener mi cuerpo en el mejor estado posible. Eso me va a permitir sentirme bien, poder realizar muchas más actividades y superar con mejor resultado los obstáculos que se presenten.
3. Pero hablo de cuidarnos con constancia, no de cara a meternos en un bikini tres tallas más pequeño del que nos corresponde.
4. Tampoco me refiero a pasar hambre, ni a dietas milagro, ni siquiera a dietas. No tenemos que matarnos a hacer ejercicio y contracturar más músculos de los que sabemos que existen.
La OPERACIÓN BOMBÓN va a tener 3 pilares:
- Cuidar nuestra piel. Del sol, del frío, del viento. Tratarla según sus características, e intentar agredirla lo menos posible con los potingues que usamos en el día a día.
- Hacer ejercicio adaptado a nuestro tiempo y necesidades. Nada de dejarnos el pellejo una semana para bajar 2 kilos y luego no mover un pie en un mes. La actividad física nos va a ayudar a alejar el estrés y la ansiedad, aumentar nuestra capacidad respiratoria y circulatoria, incrementar nuestra masa muscular (lo que nos hará más fuertes ante cualquier situación de enfermedad), controlar el colesterol, y estar en un peso adecuado para nosotros. Todo son ventajas. El objetivo es que el ejercicio sea una afición y no una obligación, por eso es importante escoger bien la actividad que realicemos.
- Y una alimentación saludable. Sabemos que todo lo que comemos repercute en nuestra salud, aspecto y estado de ánimo. Lo de "somos lo que comemos" suena a frase happy power, pero es una gran verdad. La idea es comer de todo, lo más eco y natural posible, limitando lo perjudicial, en las cantidades necesarias, haciendo uso de súperalimentos, y evitando falsos mitos o modas absurdas. Pero eso sí, hay que permitirse caprichos de vez en cuando para no caer en ansiedades. Para muchos comer es un gran placer (me incluyo) y no quiero ver a nadie llorando en una esquina por llevar un año sin comerse un donut.
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